Viajar con niños en avión

Viajar con los niños en avión a cualquier destino puede ser una aventura muy divertida pero también se puede convertir en un auténtico dolor de cabeza. El problema es que los pequeños se aburren con facilidad, sobre todo cuando deben mantenerse sentados y tranquilos durante mucho tiempo. A esto se le suma que debes tener los documentos en regla para poder volar con los niños. De hecho, te desvelamos todo lo que debes saber antes de volar, para que no te lleves sorpresas de última hora.

Trámites y documentación que requieren los niños para viajar en avión

Existen algunas normas generales relacionadas con la identificación y el acompañamiento que deben llevar los niños en un avión, independientemente de las restricciones particulares que pueda establecer cada aerolínea. De hecho, cada compañía de vuelo tiene sus propias normas y podrá solicitar la documentación que considere necesaria para garantizar la seguridad de sus pequeños pasajeros. Asimismo, cada destino fuera de la Unión Europea tiene requisitos diferentes que pueden incluir el pasaporte, una solicitud de visado u otros documentos acreditativos.

Muchos de estos trámites pueden resultar engorrosos, sobre todo si los dejas para última hora. Así que antes de reservar los billetes es recomendable que tengas la siguiente documentación:

1. DNI del niño. Las personas mayores de 14 años están obligadas, por ley, a tener un Documento Nacional de Identidad y a llevarlo durante sus viajes. Los menores de 14 años no tienen esta obligación, sin embargo, existen muchas aerolíneas que lo solicitan. El DNI es válido para viajar dentro de España y también en los países de la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo y debe presentarse junto al resto de los documentos acreditativos cuando se viaja a un destino diferente.
2. Pasaporte. El pasaporte habilita al niño para viajar a todos los países del mundo, sobre todo a los destinos que se encuentran fuera de la Unión Europea. Los requisitos para sacar el pasaporte de un menor son diferentes a los del pasaporte de un adulto, por lo que antes de solicitarlo deberás conocer bien la ley al respecto. Además, sería conveniente que antes de lanzarte a una nueva aventura a un lugar desconocido consultes en el consulado del país de destino para conocer la documentación que solicitan sus autoridades para permitir el ingreso de los extranjeros.
3. Tarjeta sanitaria internacional. Esta tarjeta no es obligatoria, pero existen muchos países que la exigen, incluso dentro de la Unión Europea. Además del seguro médico privado que puedas contratar, esta tarjeta supone una tranquilidad adicional para prevenir posibles problemas. La tarjeta tiene una validez de un año y habilita a los titulares a recibir atención médica en los servicios sanitarios públicos del país de destino. Puedes solicitarla a través de Internet o en los centros de Seguridad Social.
4. Tarjeta de vacunación. Existen muchos países que no aceptan la entrada de niños si antes no han sido vacunados contra ciertas enfermedades. Por tanto, antes de viajar con niños deberías actualizar su tarjeta de vacunación incluyendo las vacunas obligatorias y las recomendables. En España existen alrededor de 77 Centros de Vacunación Internacional especializados en estas cuestiones, por lo que no tendrás problemas para actualizar la tarjeta de vacunación del niño.
5. Libro de familia. El libro de familia no es un documento que necesites para viajar, pero se recomienda llevarlo, sobre todo cuando se trata de viajes largos. Este documento prueba la relación de consanguinidad, la patria potestad y la custodia del niño. Es muy conveniente, sobre todo cuando solo uno de los padres piensa viajar con el pequeño ya que de esta manera puedes evitar malos entendidos en el país de destino.

Cinco consejos que debes tener en cuenta para que el viaje con el niño marche sobre ruedas

1. Escoge el asiento idóneo

Escoger el asiento idóneo para viajar con un niño puede evitar muchos problemas a lo largo del viaje. Lo ideal es que reserves asientos en la primera fila ya que, además de ser más espaciosa, también resulta más práctica para entrar y salir del avión. También sería oportuno que pidieras un asiento junto a la ventanilla para que el niño pueda entretenerse al menos durante el despegue y el aterrizaje.

2. Solicita accesorios en la reserva

Para los niños menores de dos años, la mayoría de las aerolíneas suelen proporcionar una cuna que deberías solicitar cuando hagas la reserva. También existen aerolíneas que preparan menús especiales para niños y que ofrecen algunos accesorios adicionales para su seguridad y entretenimiento. Si los necesitas, solicítalos cuando hagas la reserva del billete.

3. Toma precauciones en el despegue y aterrizaje

Durante el despegue y aterrizaje los cambios en la presión atmosférica suelen causarles a los niños dolor de oídos, obstrucción nasal y mareos. Para prevenir estas molestias conviene tragar saliva o masticar algo, por lo que sería ideal que le dieras al pequeño algún caramelo para masticar en esos momentos. Si es menor de dos años puedes darle un chupete, agua o zumo.

4. Mantenlo bien hidratado durante el vuelo

Los niños, sobre todo los bebés, son más propensos a deshidratarse. Por eso debes mantenerlo bien hidratado durante todo el vuelo dándole de beber cada media hora aproximadamente, sobre todo en los vuelos de larga duración. También puedes aplicar una loción hidratante en su piel para evitar la sequedad causada por la baja humedad en el avión.

5. Lleva en tu equipaje de mano libros y juegos

Los niños suelen aburrirse con mucha facilidad durante los vuelos, sobre todo si son muy largos. Por eso se recomienda que lleves algunos libros para leerle, juegos, videojuegos, libros para colorear, muñecos de peluche o alguna película en el tablet que le guste. De esta manera se mantendrá más tranquilo hasta llegar al destino.