Vestidos de comunión para niña: ¿Cómo encontrar el modelo adecuado?

Una vez que la niña ha pasado la catequesis, está preparada para recibir su primera comunión, lo cual suele ocurrir después de los 7 años. Se trata de un momento muy especial también para la familia ya que es uno de los fundamentos de la fe cristiana. De hecho, ni siquiera la crisis ha podido dar al traste con este ritual, en el que cada familia gasta una media de 2.412 euros, según un estudio llevado a cabo por la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes.

Obviamente, después de la fiesta y el banquete, el vestido de comunión es uno de los mayores gastos. Como promedio, los padres invierten unos 225 euros en el vestido de comunión para su hija, los cuales suelen ser mucho más caros que los trajes para niños. Sin embargo, al final el 12% de los padres no se sienten satisfechos con el vestido elegido.

Como sabemos que elegir el vestido para la primera comunión no es una tarea sencilla, queremos darte algunos consejos que te ayudarán a tomar la mejor decisión y a ahorrar.

Cinco consejos para elegir el vestido de comunión

1. Tomar en cuenta los gustos de la niña

os padres a menudo cometen el error de elegir los vestidos que prefieren ellos, sin tener en cuenta las preferencias de la niña. Sin embargo, no debemos olvidar que, al fin y al cabo, será la pequeña quien llevará el vestido durante todo el día. Por tanto, debes tomar en consideración su opinión y gustos. Pregúntale además si le queda cómodo ya que de lo contrario, la comunión se convertirá en una verdadera tortura.

2. Considerar el tipo de tejido

El precio el vestido de comunión dependerá, en gran medida, del tipo de tejido. Hay un universo inmenso de telas entre las cuales elegir, desde el tul y el algodón hasta la seda, la organza y el piqué. Es conveniente que no comiences la búsqueda fijándote solo en un tipo de tejido sino que debes abrirte a otras posibilidades, podrás encontrar más opciones a precios más razonables.

3. Seleccionar el estilo del vestido

Hay diferentes estilos, desde el clásico vestido de corte princesa, con falda amplia y cancán, hasta los vestidos de corte recto, que son más sencillos y ligeros. También se encuentran los vestidos de fantasía, que están causando furor y se asemejan más a los vestidos de fiesta, con pedrería, volantes y lazos. Sin embargo, antes de decantarte por un modelo, considera si quieres que este tenga una segunda vida. Los vestidos más sencillos se pueden volver a utilizar en bodas o cumpleaños, pero los modelos más recargados probablemente quedarán relegados a un rincón del armario.

4. Elegir los complementos adecuados

Los vestidos de comunión admiten muchos complementos. De hecho, puedes elegir un modelo sencillo y resaltarlo con unos guantes, un pasador y una bonita diadema o una corona de flores. Por supuesto, no olvides la coqueta limosnera, un complemento imprescindible.

5. Seleccionar sabiamente la tienda

En la actualidad muchas de las grandes marcas también ofrecen vestidos de comunión, como es el caso de Rosa Clará y Devota & Lomba. Obviamente, hay opciones mucho más económicas en tiendas como El Corte Inglés y, si tienes un presupuesto muy ajustado, puedes optar por los vestidos de segunda mano, que normalmente suelen estar en perfectas condiciones ya que las niñas se los ponen solo una vez. De esta forma podrás ahorrar al menos un 50% en su precio y, aún así, encontrar un modelo digno de princesa.

Considera además la época del año. Las comuniones se suelen realizar en primavera por lo que el tiempo puede ser impredecible. En esos casos, sería conveniente contar con una pequeña chaqueta o torera, para que la pequeña pueda cubrirse si siente frío.