Tu reacción ante las rabietas de tus hijos marcará su desarrollo emocional

Ser padre o madre es una experiencia maravillosa pero al mismo tiempo es lo más difícil que harás nunca. Educar a los hijos es el trabajo más complicado y con más incertidumbres que hay en el planeta, aunque también el más gratificante. Ser padres es vivir viendo a los hijos crecer y enfrentarnos diariamente a retos que nos ponen los hijos delante. Uno de estos retos son las rabietas (que no solo ocurren cuando son pequeños, sino a cualquier edad). 

La fotografía que muestra qué hacer

Cuando un padre o una madre empieza la aventura de serlo, no piensa en qué tiene que hacer o no hacer cuando su hijo tenga rabietas, pero las tendrá. Aunque no hay un mejor o un peor modo de actuar ante ellas, sí hay formas más adecuadas que podrán hacer que tu hijo aprenda que las rabietas solo son emociones intensas que debe aprender a canalizar y también entender. Pero para lograr esto (que no se consigue de la noche a la mañana, sino que son años de práctica…) tus hijos necesitarán algo muy importante de ti: tu calma y tu paciencia. 

En la fotografía que queremos mostrarte se puede ver un ejemplo claro de lo que estamos diciendo. En la imagen puedes ver a Justin Baldoni, un actor americano que tiene una hija pequeña llamada Maiya. En la fotografía Maiya de unos dos años, está teniendo una rabieta en medio de un espacio público, el que parece ser un supermercado.

Los niños ante las rabietas necesitan lo que ves en la imagen: calma y tranquilidad por parte de los adultos que tienen a su alrededor, que en este caso es el padre y el abuelo de la pequeña. Justin envía un mensaje viral con esta imagen, un mensaje que todos los padres deben recordar en la crianza de sus hijos: depende la forma en la que reacciones ante las rabietas de tus hijos, así será su desarrollo emocional.

Estar cómodo en lo incómodo

‘Estar cómodo en lo incómodo’ es una de las frases que utiliza Justin al comentar su reacción ante la rabieta de su hija: ‘Estar cómodo en lo incómodo. Algo que crecí viéndolo a él (su padre) hacerlo una y otra vez’. Esta frase es importante porque se puede ver en la imagen cómo Justin sigue el mismo ejemplo que su padre, es más, los dos aparecen casi con la misma postura mirando a la pequeña ante su rabieta.

Si alguna vez te has sentido incómodo/a u observado/a ante una rabieta de tus hijos en un lugar público, no te preocupes, es normal. La realidad es que no te tiene que importar lo que piensen otras personas, tú tienes que pensar en el bienestar y desarrollo de tus hijos y por eso es necesario tener presente que según cómo reacciones así crecerán ellos. Como dice Justin en su mensaje: ‘No hay padres perfectos, pero una cosa que mi padre me enseñó es a no ejercer mi paternidad basándome en lo que piensen los demás’.

Las rabietas no son cómodas ni para los hijos ni para los padres, pero suceden y sucederán porque es parte del desarrollo emocional de los niños. Los niños pequeños necesitan repetición para interiorizar las cosas así que la paciencia será tu mejor herramienta para que aprendan de sus rabietas poco a poco. A los niños les cuesta comunicar y expresar sus sentimientos y en muchas ocasiones, cuando son más pequeños no comprenden bien lo que les estás diciendo. Pero todo esto es normal y es la forma en que tienen de expresar sus emociones más intensas, sus decepciones o sus frustraciones.