No importa la edad, los brazos de mamá siempre serán el mejor refugio
[mashshare icons=»1″]
No importa la edad que tengamos, los brazos de una madre siempre serán el mejor refugio. Cuando una persona llega al mundo, los brazos de mamá son ese lugar seguro donde nada malo puede suceder. A medida que va creciendo se convierte en un escudo de seguridad y cuando un niño deja de ser niño o adolescente y se convierte en un adulto, los brazos de mamá siempre serán ese lugar especial.
Los brazos de mamá curan cualquier herida emocional de forma natural, calman cualquier ansiedad y la felicidad que se obtiene en ellos no se encuentra en ningún otro lugar del mundo. Hay quienes piensan que a medida que vayan creciendo no serán necesarios sus abrazos, pero la realidad es que siempre lo son.
Los brazos de mamá son el mejor refugio
Solo el hecho de que mamá nos rodee con sus brazos es motivo suficiente para que nos sintamos mejor, sin importar cuáles son las circunstancias de la vida. Su dulce voz, el olor de su piel y el calor de su cuerpo siempre nos transportará a ese lugar seguro dentro de su corazón.
Sabemos que mientras mamá nos pueda abrazar, no nos faltará nunca el amor incondicional que tuvimos desde el momento en que nacimos. Antes de nacer somos un todo en el cuerpo de nuestra madre, pero cuando llegamos al mundo, nuestros cuerpos se dividen pero los corazones se mantendrán unidos para siempre.
Sus brazos forman los mejores abrazos
Aunque es cierto que un abrazo no elimina todos los problemas, si es de mamá, los aminora bastante. La ansiedad que se pueda tener se reduce considerablemente y la calma en el corazón hace que sintamos que los problemas no son tan graves. Los abrazos de mamá curan cualquier herida emocional que se pueda tener, o por lo menos, ayuda a en el proceso de sanación.
El abrazo de una madre es el gesto más genuino de amor que se puede obtener en toda la vida. Transmite la energía que se necesita para continuar con buena actitud porque sabemos que mamá está ahí para cuidarnos, tengamos la edad que tengamos.
Con los abrazos de mamá nos sentimos las personas más amadas del planeta, algo fundamental para sentirnos valorados y parte de un colectivo: la familia. Los abrazos de mamá acarician el alma, forjan la autoestima y hacen que se tenga una personalidad arrolladora.
Mamá nos habla sin necesidad de pronunciar una sola palabra porque son sus gestos, sus caricias y su mirada lo que conocemos como el lenguaje más puro que existe. El sentimiento incondicional del amor de una madre hacia un hijo nunca muere y siempre lo entenderemos, puesto que es el lenguaje del corazón.
Tus abrazos también son el mejor tesoro de tus hijos
Si te has dado cuenta de que los abrazos de tu madre siempre serán tu mejor refugio sin importar la edad que tengas, recuerda que eso mismo, también les pasará a tus hijos. Ellos necesitan tu amor incondicional y tus abrazos casi como el aire que respiran. Su sonrisa estará asegurada cuando se den cuenta de que tus brazos son y serán siempre el mejor refugio, ¡siempre serán su hogar!
No hay nada en el mundo que reconforte más que los brazos de mamá. Es el mejor antidepresivo, ansiolítico y sanador de problemas emocionales, ¡porque no hay nada que no arreglen!
Una madre siempre será el hogar de sus hijos. No importa dónde estén o la edad que tengan… donde está una madre siempre será un hogar para ellos. Si tienes la suerte de tener una madre, ¡abrázala siempre que tengas ocasión! Y si eres madre… nutre el alma de tus hijos con tu amor incondicional a través de tus abrazos que reducirán sus niveles de cortisol y serán más felices en la vida.
Comentarios