Educación

El método Montessori y los niños con problemas en el procesamiento sensorial

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Montessori niños problemas sensoriales
Mª José Roldán

Mª José RoldánMaestra y Psicopedagoga

La pedagogía Montessori es un método educativo que últimamente está empezando a tener muchos más seguidores, no sólo porque se centra en los niños y en su capacidad innata de aprendizaje, sino porque también se pueden comprobar los buenos resultados de aprendizaje y también emocionales. Los niños disfrutan aprendiendo y sienten que tienen el control sobre lo que hacen y cómo lo hacen. El adulto es una guía que enseña al pequeño el camino que debe recorrer. Pero, ¿qué ocurre cuando los niños tienen problemas en el procesamiento sensorial? ¿Se puede aplicar el método Montessori?

Hay personas que piensan que el método Montessori no puede aplicarse a niños con problemas en el procesamiento sensorial porque esta pedagogía se basa sobre todo, en el contacto directo con la naturaleza y los materiales de forma individual, algo que los niños con problemas sensoriales no podrían realizar. Pero, ¿cómo que no? Los niños que están creciendo y desarrollándose y además luchando con un trastorno sensorial, necesitan el apoyo de sus padres y profesores para asegurar un buen ambiente de aprendizaje y además apropiado. En estos casos el método Montessori puede proporcionar una estructura ideal para los niños que tienen problemas sensoriales.

Dificultades o Trastorno del procesamiento sensorial

Cuando se tienen dificultades del procesamiento sensorial, podemos decir que es un procesamiento neurológico ineficaz donde la información recibida a través de los sentidos causa problemas en el aprendizaje, el desarrollo y el comportamiento. Los síntomas comunes en un niño con trastornos sensoriales pueden ser: sensibilidad extrema a los sonidos o a la luz, ataques de nervios, intolerancia a algunas texturas de alimentos o sabores, reactividad aguda a tocar la ropa o frotar el cuerpo, agitación cuando les tocan, etc.

El desarrollo sensorial

El desarrollo de los sentidos es un aspecto fundamental para cualquier persona, pero sobre todo para los bebés y niños en sus primeros años de vida. Para un buen desarrollo se necesita el apoyo sensorial ya que así el niño puede mejorar sus niveles de energía y le ayudará no sólo a aprender mejor sino también, a auto regular sus conducta.

María Montessori decía que los niños aprenden principalmente a través de la absorción de la información del entorno a través de los sentidos. Entonces, ¿cómo conseguirlo si hay un trastorno del procesamiento sensorial? Los materiales sensoriales de aprendizaje en las clases Montessori apoyan a todo el cerebro porque abordan las necesidades del desarrollo del niño, por eso son especialmente beneficiosos para los niños que presentan dificultades en el procesamiento sensorial.

Montessori sensorial

Además cada maestro que esté especializado en la metodología Montessori tendrá la conciencia suficiente para poder trabajar con los materiales a través de una integración sensorial, ajustando los materiales y las lecciones en base a las necesidades sensoriales específicas de cada niño.

Las clases Montessori y los niños con problemas sensoriales

Un niño que tenga dificultades en el procesamiento sensorial podrá responder positivamente a un trabajo en el aula que sea rutinario, así podrá saber qué hacer en el entorne. Las aulas Montessori están diseñadas para facilitar la estructura, la organización y la fluidez de movimiento. El aula es un ambiente preparado en el que cada actividad tiene una finalidad específica en el aprendizaje, cada material tiene un espacio asignado en el estante y existen unas pautas de comportamiento para ayudar a los niños con el desarrollo de la independencia funcional. Un ambiente ordenado puede ayudar a un niño con trastornos del procesamiento sensorial a que se sienta seguro y cómodo.

Cada niño es único en su desarrollo y hay que respetar sus ritmos y su idiosincrasia. Es por eso que los maestros de las aulas Montessori deben adaptar un plan de estudios y sus metodologías a las necesidades individuales de cada niño, sean cuáles sean.

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