Dar libertad a los adolescentes para poder confiar en ellos
La libertad y la confianza son necesarias para una buena comunicación con los hijos adolescentes
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Son muchos los padres que piensan que sus hijos adolescentes son muy inmaduros y que confiar plenamente en ellos podría ocasionar más de uno y dos problemas, pero la realidad es que sin confianza un hijo o hija adolescente no podrá madurar completamente. Necesitan de tu confianza para poder evolucionar y poder desarrollarse como una persona íntegra y saludable.
Depende de nosotros como padres el apoyar su movimiento hacia la independencia mediante la concesión de más y más libertad. Es el trabajo de los adolescentes demostrarnos que se puede confiar en esa libertad que les estamos proporcionando. Cuanto más puedas confiar en ellos, más libertad le podrás dar por lo que será de tu interés y del suyo que el comportamiento sea el correcto. Hay algunas formas de poder hacerlo y que los adolescentes se den cuenta de la importancia de su actitud y comportamiento hacia los demás.
Dar más libertad a los hijos para potenciar la confianza
Para poder dar más libertad a los hijos y que la confianza sea buena, debe ser un trabajo que se ha de lograr por ambas partes. Los padres dan más libertad y los hijos demuestran que se puede confiar en ellos. Para que esto ocurra se debe tener en cuenta lo siguiente:
- Las salidas deben ser donde se dice que van a ser. Si cambia el plan te lo tiene que decir. Si te lo dice y es verdad, deberás ser agradecido y si no te lo quiere decir, entonces no te enfades con él o ella, simplemente hazle saber que sin confianza por ambas partes no podrá conseguir la libertad que desea. Debe ser un ganar-ganar.
- Tu hijo debe estar siempre localizable. Es muy importante que tanto tú como tu hijo estéis siempre localizables cuando estéis separados. Deja tu teléfono con sonido por si llama y así que puedas responder rápidamente y lo mismo debes exigirle a él. No significa que le vayas a llamar a cada dos por tres, pero si ocurre algo debe saberlo inmediatamente. Para esto, es necesario llegar a un acuerdo de ponerse en contacto con ellos tan solo si es necesario. Dale el espacio que necesita.
- La honestidad ante todo. Es muy importante que seáis honestos por ambas partes. Si tu hijo es honesto contigo y te dice la verdad de las cosas, es necesario que a cambio seas comprensivo. Si ha ocurrido algo negativo pero tu hijo te ha dicho la verdad, hazle ver que la honestidad tiene más recompensa y acordad una consecuencia negativa acorde a lo ocurrido pero teniendo en cuenta que ha sido lo suficientemente valiente como para decir la verdad.
Comunicación y disciplina
Es muy importante que en la relación de padres/madres e hijos adolescentes exista una buena comunicación y que además haya sinceridad por ambas partes. Esto le proporcionará seguridad y confianza a tus hijos, verán que pueden confiar en ti. Esto será poco probable si cuando tu hijo/a es honesto/a contigo existen consecuencias severas al decir la verdad o cuando quieren mantener una comunicación abierta. Si esto ocurre pueden aprender que si hablan contigo deben medir sus palabras -u ocultarlas- para evitar consecuencias negativas.
Recuerda que la disciplina trata de enseñar y ser el guía de un hijo/una hija y no de castigar o de imponer normas severas para que tus hijos obedezcan a ciegas y sin tener en cuenta su opinión o sus intereses. La disciplina debe enseñar a tus hijos a que vuestra relación se basa en el respeto mutuo y en la confianza, por lo que la libertad que quiere para poder sentir que controla su mundo se la debe ganar, y una vez que lo haya logrado, no habrá problema de comunicación, confianza y libertad.
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