Educación

Los juicios rápidos ante la discapacidad

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discapacidad invisible
Mª José Roldán

Mª José RoldánMaestra y Psicopedagoga

En la sociedad en la que vivimos hay discapacidad, personas que tienen algún tipo de limitación física o mental que les imposibilita o dificulta un desarrollo normal en la actividad de la persona. Pero también hay ocasiones en las que cuando se ven a los niños jugar, caminar o simplemente estar con sus padres no te darías cuenta de que tiene algún tipo de discapacidad.

Son solo niños…

Por ejemplo, hay niños que tienen discapacidad visual pero ven lo suficiente como para poder interactuar con normalidad en su día a día con su familia. Otros niños que tienen discapacidad auditiva pero que no te los imaginarías por cómo juegan al fútbol o al baloncesto… Oyen lo necesario para que su día a día lo puedan superar, aunque esté lleno de retos.

También hay niños que aunque tienen discapacidad motora no lo parece cuando están jugando a juegos de mesa o incluso cuando caminan por la calle cogidos de la mano de sus padres. Otros niños que pueden tener discapacidad intelectual pero que no te lo imaginarías mientras disfrutan de una comida en un restaurante con sus padres o mientras pintan un dibujo y lo dejan precioso. Del mismo modo, aquellos niños con discapacidad social, puede ser un desafío el contactar con los demás, pero pueden disfrutar muchísimo de actividades individuales.

Todos estos ejemplos son niños, que viven la vida como niños que son. Su discapacidad en algunas ocasiones de su vida puede pasar a un segundo plano, porque en realidad ellos son solo eso: niños. Niños que quieren vivir y disfrutar de la vida, tal y cómo les ha tocado vivir, según cómo pueden vivirla.

…que se convertirán en adultos

Estos niños se convertirán en adultos. Serán adultos que han aprendido a vivir la vida de diferentes maneras, acorde a sus propias capacidades, acorde a la sociedad donde se encuentran. Algunos necesitarán bastón, otros silla de ruedas, otros un perro guía, otros un audífono, otros necesitarán el lenguaje de signos para comunicarse, etc.

Lo que acabamos de menciones más arriba, estos elementos que necesitan algunos niños, solo son señales de la discapacidad para el resto de las personas, pero que en lugar de generar juicios lo necesario es que la sociedad pueda entender cómo es la vida de estas personas y les faciliten, en cierta medida su vida.

juicios discapacidad

La inclusión ante la discapacidad

Hay veces que la discapacidad es invisible ante los ojos de muchas personas. Hay discapacidades que están escondidas y que no se pueden percibir ni valorar. Hay quienes no dicen nada para que la sociedad no les etiquete, para que otros les acepten.

La inclusión es necesaria para que en esta sociedad las personas puedan sentirse parte de ella teniendo en cuenta al mismo tiempo sus capacidades personales, independientemente de si les limitan o imposibilitan un desarrollo normalizado.

La sociedad debe evitar juzgar a los que nos rodean de esa forma rápida y en muchas ocasiones, de forma equivocada. Quizá esa persona con discapacidad no es consciente de alguna de sus limitaciones porque para esa persona es una forma de vivir, no piensa que sea una molestia para ti… ¿te das cuenta de la ironía? Que una persona con discapacidad que tiene que afrontar obstáculos que la misma sociedad pone deba aguantar al mismo tiempo los juicios que esa misma sociedad emite contra ella… ¡es el colmo!

La paciencia, la comprensión y la empatía son las mejores herramientas para comprender y ayudar a las personas con discapacidad, ya sean niños o personas adultas. Necesitan inclusión y no que se les juzgue de forma gratuita. Ellos nos aportan una valiosa diversidad a la sociedad que debemos aceptar y agradecer, porque nos permiten ver diferentes realidades. Nadie está libre de que la discapacidad toque algún día a su vida.

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