Cómo inculcar una imagen corporal positiva en los niños

En la actualidad vivimos en una sociedad donde el aspecto físico está sobrevalorado. Para muchas personas lo que refleja el espejo es demasiado importante como para ignorarlo… tan importante que puede ser la clave para que una persona tenga confianza en sí mismo o no. Los espejos, la talla de la ropa, las etiquetas, los anuncios y la publicidad… todo ello hace que sintamos una pequeña distorsión de la realidad.

Si nosotros como padres tenemos una imagen corporal negativa es posible que estemos inculcando a nuestros hijos esta forma de ver el cuerpo. Tener una imagen corporal positiva no significa creer que el cuerpo debe ser perfecto, lo que significa es la aceptación del cuerpo tal y cómo es. Existen algunas estadísticas sociales que son algo alarmantes:

• Los trastornos alimentarios aumentan tanto en niños como en hombres
• 1 de cada 8 mujeres han tenido un trastorno de alimentación en algún momento de sus vidas
• Son muchas las personas alrededor del mundo que no están satisfechas con su apariencia
• Los niños se preocupan demasiado por su cuerpo -apariencia física-

Un estudio de 2007 de la Universidad de Sydney -Australia- de casi 9000 adolescentes encontró que una quinta parte de las adolescentes pasa hambre o se provocan el vómito para controlar su peso. El 8% de las chicas adolescente fumaba para controlar el peso. Los chicos adolescentes también lo hacían.

En un estudio realizado por Dove con 3.300 niñas y mujeres de entre 15 y 64 años procedentes de 10 países, descubrió que el 67% de las mujeres no acuden a actividades diarias con otras personas porque se sienten mal con su físico. Después de leer todo esto, es necesario ser conscientes de que hay mucho que se puede hacer para proteger a nuestros hijos contra una imagen corporal negativa.

Ser un buen modelo de auto compasión

Un estudio reciente encontró que el ser un buen modelo de auto compasión protege a las niñas y a las mujeres jóvenes de las prácticas de control de peso que no son saludables y de los trastornos de alimentación. Las mujeres que eran capaces de ser compasivas con ellas mismas eran capaces de tener una imagen corporal positiva y también mejores hábitos alimenticios. Si quieres que tus hijos tengan una buena imagen corporal entonces, empieza siendo amable contigo mismo/a y tu cuerpo.

Hacer comentarios positivos sobre otros

Hacer comentarios positivos a tus hijos sobre otras personas. La gente que está segura de sí misma -y que no son arrogantes- irradian una belleza que es envidiable. Deja que tus hijos sepan que la belleza no se detiene en ellos y así contrarrestará el constante bombardeo que los medios de comunicación hacen cada día intentando mostrar todo lo contrario -que la belleza es medible y que existen cánones de belleza-.

No hablar del peso o de las partes del cuerpo que no gustan

Es importante el evitar hablar del peso o de las partes del cuerpo que no te gustan. Si tienes que hacerlo hazlo sin que tus hijos estén delante. Si lo haces, ellos lo aprenderán y harán lo mismo porque quieren ser como tú. No hay nadie más influyente que tú en sus vidas. Tus hijos seguirán tus pasos, lo que haces y lo que dices.

Evitar las comparaciones a toda costa

Los investigadores de Harvard encontraron que cuando la televisión por cable llegó a Fiji en 1995 (y se transmitía por televisión Friends, Ally McBeal, Melrose Place y similares), las tasas de anorexia nerviosa y la bulimia se dispararon. Antes de esto, se apreció que los trastornos de alimentación eran casi inexistentes en la isla.

Muchos de los medios de comunicación promocionan la perfección y la belleza… dejando claro que está por encima de todo. Pero nuestros hijos deben saber que nadie se parece a las personas de las fotos de las revistas, ¡ni siquiera las personas que salen en ellas!