La importancia del padre durante el embarazo

Es cierto que somos las mujeres quienes llevamos al bebé en nuestro vientre. Se desarrolla dentro de nuestro ser. Tenemos que cuidar nuestra salud para cuidar a nuestro pequeño en formación. Los síntomas buenos y malos del embarazo lo sufrimos nosotras. Las mujeres embarazadas también sacrifican en muchos casos sus cuerpos y su salud por da vida a su pequeño. Nosotras pasamos por el parto o cesárea y por la recuperación postparto que en muchos casos es difícil.

Sí, nosotras las mujeres tenemos un papel prioritario en cuanto al embarazo, pero en todo este proceso de altibajos que dura 9 meses, el padre, también tiene mucha importancia. ¡No se puede negar lo evidente! Su apoyo emocional, su presencia y su ayuda se vuelven fundamentales, sobre todo cuando la mujer embarazada está con el embarazo avanzado.

Ellos también forman parte

Algunos padres piensan que el embarazo no va con ellos, ¡pero nada más lejos de la realidad! Deben sentirse involucrados porque aunque no lleven al ser dentro de su vientre ni tengan que pasar por el parto y postparto, esa vida que se gesta dentro del útero de la mujer, también forma parte de ellos.

Es importante que los padres formen un vínculo con sus hijos desde el embarazo, porque así se asegurarán de que el vínculo se fortalezca en el futuro. Una mujer embarazada necesita seguridad emocional y eso el padre debe proporcionárselo siempre. Los padres pueden evitar muchos de los miedos que puede experimentar la madre durante el embarazo y prevenir que tenga ansiedad. Es necesario que acepten la identidad cambiante de la mujer y los problemas físicos e incluso psicológicos que puede tener.

La mujer embarazada necesita respaldo emocional

Si la mujer se siente respaldada emocionalmente durante el embarazo, es menos probable que experimente depresión postparto, en cambio, si no es así, las posibilidades aumentan. Los bebés que están en el útero no pueden distinguir entre los sentimientos de su madre y los propios y, por lo tanto, sus sentimientos pueden afectar directamente la salud y el bienestar de su bebé en desarrollo.

Un padre que abusa o descuida a su mujer embarazada está creando una de las experiencias emocionales y físicas más peligrosas para su hijo que aún está por nacer. Si la mujer embarazada está en una relación abusiva, debe encontrar un lugar seguro por el bien de su hijo y su bienestar futuro.

Los bebés nacidos en matrimonios infelices tienen cinco veces más probabilidades de ser más miedosos y nerviosos que los bebés nacidos en relaciones felices. La forma en que los padres tratan a las madres y a sus bebés por nacer puede tener un efecto directo en la formación de la personalidad y el carácter de los hijos.

El papel de los padres

Los padres deben aprender a apoyar a la mujer embarazada mediante masajes, diciéndole cosas apropiadas durante el embarazo y el parto. Ellos pueden llegar a ser una gran fuente de estabilidad y seguridad durante todo este proceso. Las mujeres que cuentan con un buen apoyo emocional (pareja, doula, madres, etc.) durante el alumbramiento, necesitan menos intervenciones, son partos más cortos y sienten una mayor satisfacción general con toda la experiencia del embarazo y parto.

Los bebés en el útero son conscientes y necesitan sentirse amados desde el primer momento. Por eso, los padres, deben hablar a sus bebés mientras están en el vientre de la madre con todo su cariño y amor de forma constante. Los bebés son capaces de reconocer las voces que habían escuchado en el útero una vez que nacen. Si el padre le habló con cariño al feto, el bebé formará una conexión emocional con el padre. La voz de papá podría tener un efecto tranquilizador y calmante para el bebé porque el sonido familiar le permite al bebé saber que está a salvo.

Se debe alentar a los padres a reconocer los poderosos sentimientos que surgen a medida que se involucran durante el embarazo y el parto y permitir que surja su nueva identidad como padre.