Descubre cómo la gamificación se convierte en un aprendizaje divertido

El modelo de gamificación es un nuevo tipo de aprendizaje que los niños lo sienten como divertido y que por tanto, funciona. Aprenden sin esfuerzo y además se lo pasan bien. Es una manera de introducir los juegos no solo como algo lúdico, sino también como educativo. Por este motivo tanto profesionales de la educación como niños y niñas están encantados.

La gamificación

La gamificación es por tanto, una técnica de aprendizaje educativa donde los juegos son los protagonistas para conseguir mejores resultados académicos en los alumnos. Estos juegos pueden ayudar a los alumnos en muchos ámbitos como por ejemplo:

• Mejorar habilidades
• Satisfacción por los objetivos conseguidos
• Mejorar los conocimientos
• Resolver problemas de manera lúdica
• Gestionar el control emocional

Existen muchos objetivos, dependiendo del tipo de juego y de lo que se quiere conseguir con él. Lo que importa es centrarse en los resultados pero que sea el esfuerzo lo más importante en todo el proceso. Al tener un carácter divertido los niños interiorizan mejor los contenidos casi de manera inmediata, porque se divierten y no se dan cuenta de que están aprendiendo.

Este aprendizaje no requiere esfuerzo porque para el alumno se convierte en una experiencia positiva. Al ser de esta manera, no percibe el aprendizaje como algo tedioso, que le cansa o que le genera malestar. En este sentido, los alumnos no se dan cuenta de que están aprendiendo o estudiando, solo perciben que están pasando un buen rato mientras juegan, aunque de manera paralela estén aprendiendo.

Motivación a través del juego

La clave de esta técnica de aprendizaje es la motivación. Se motiva a los alumnos de manera externa, pero la mejor motivación que sucede es la interna, la que sale desde dentro de uno mismo. La gamificación consigue esto gracias a sus características concretas.

Esto hará que sientan que son ellos los que controlan la situación, los que deciden si aprender o no, pero como están tan motivados deciden jugar, y aprender… gracias a esto, tendrán compromiso con ellos mismos y con el aprendizaje. Querrán superarse para conseguir mejores resultados a través de diferentes técnicas de aprendizaje plasmadas en los juegos.

La técnica mecánica

La técnica mecánica es la manera de recompensar al alumno siempre que cumple una serie de objetivos del juego. Esta recompensa externa hará que su motivación interna crezca más, en realidad no llega a ser una motivación externa en ningún momento.

Existen técnicas mecánicas que se utilizan habitualmente. Algunas de ellas son:

• Acumulación de puntos. Quienes consigan más puntos tendrán más posibilidades de conseguir los objetivos.
• Escalado de niveles. Los niveles se van alcanzando siendo el objetivo pasar a los siguientes.
• Premios. A medida que se cumplen objetivos se reciben premios que se coleccionan.
• Regalos. Se obtienen cuando se consiguen objetivos.
• Clasificaciones. Se clasifica a los jugadores dependiendo de los puntos u objetivos que van alcanzando. Los mejores estarán en la zona alta de la lista de clasificación.
• Desafíos. Entre los jugadores se realizan competiciones y el mejor es el que se lleva los puntos o el premio.

Como ves, esta técnica es ideal para potenciar esa motivación tan importante en los alumnos, para que quieran seguir jugando y conseguir los objetivos, que en este caso sería el aprendizaje y adquisición de conocimientos.

Entre las dinámicas que más se utilizan están:

• Recompensas. Obtener beneficios.
• Estatus. Tener un buen nivel jerárquico social.
• Logros. Superación o satisfacción personal.
• Competición. Competir para conseguir mejores resultados que otros.

Dependiendo de lo que se quiera conseguir se buscará la forma de lograr los objetivos en la técnica para así obtener los mejores resultados posibles. Lo importante de esto no es jugar en sí mismo, si no que el sistema de puntuación-recompensa-objetivo sea eficiente y que los niños y niñas se sientan motivados para continuar con su aprendizaje.