¡Demuestra el amor por tus hijos en San Valentín!

Lo habitual es demostrar a la pareja el amor que se siente por ella en el día de San Valentín, ¡pero puedes hacer mucho más que eso! Aunque el amor se demuestra durante todo el año, el día de San Valentín es el día perfecto para trabajar con los hijos el concepto del amor y por qué es importante cuidar a las personas que queremos siempre.

Por este motivo, queremos que en el Día de San Valentín, demuestres a tus hijos todo tu amor por ellos. Será una manera de que ellos aprendan cómo demostrar a los demás que les quieren y que entiendan que el amor es como una planta pequeñita que hay que regar todos los días para que crezca sana y fuerte. Y no nos referimos al amor romántico, nos referimos a cualquier tipo de amor entre personas.

Formas para demostrar el amor a tus hijo en San Valentín

Si te faltan ideas para demostrar el amor a tus hijos en San Valentín, a continuación vamos a darte algunas para que el 14 de febrero se convierta en una fecha muy importante para vosotros… ¡y que tus hijos recordarán y disfrutarán gracias al amor que existe entre padres e hijos! Recuerda que las formas de amor no hay que hacerlas solo cuando es 14 de febrero, ¡puedes demostrar a tus hijos que les amas todos los días de tu vida!

• Palabras positivas. Las palabras positivas le harán sentir que es grande emocionalmente. No uses el sarcasmo y palabras hirientes, ¡nunca le hagas sentir menospreciado! Habla a tus hijos como te gustaría que te hablasen a ti.
• Sé un buen ejemplo. Sé un buen ejemplo de cómo debes conectar con los demás. Usa palabras como “por favor”, “gracias” o “lo siento”. Muestra respeto hacia las demás personas con palabras y acciones. Ser un buen ejemplo para tus hijos será un regalo maravilloso que le durará toda la vida.
• Responde con cariño a las necesidades físicas y emocionales de tu hijo. Escucha cuando te tiene que decir las cosas y pregúntale cómo le fue en la escuela. Si te das cuenta de que tu hijo tiene ansiedad o depresión habla con un profesional.

• Regala abrazos cuando tu hijo esté de mal humor. En lugar de ponerte nervioso/a ante este tipo de comportamiento iracundo, muestra que la calma es el secreto para las emociones más intensas. Nunca respondas con violencia ante ninguna situación.
• Haced planes para pasar el tiempo juntos. Busca actividades que disfrutes tanto tú como tus hijos y hacedlo juntos. Anima a tus hijos a llevar una vida activa realizando actividades en familia o solo contigo, por ejemplo: salir a caminar al parque, montar en bicicleta, jugar…
• Escríbele una tarjeta de San Valentín. Las tarjetas de San Valentín tienen más significado del que te puedas imaginar, sobre todo para los chicos y chicas adolescentes. Envíale una tarjeta de san Valentín a tu hijo/a adolescente y escribe aquellas cosas bonitas que quieres que sepa o que al menos recuerde.
• Noche de juegos. Las noches de juego en familia es una forma maravillosa de potenciar el vínculo padres e hijos mientras se pasa un buen rato juntos. Cada noche de juegos escogerá un miembro diferente de la familia el juego para jugar por todos, ¡así todos se sentirán partícipes!
• Cocinad juntos. Podéis cocinar juntos para aprender a tener una buena nutrición. Id a comprar los ingredientes, hablad sobre la alimentación y la importancia de una dieta equilibrada. En San Valentín podéis saltaros un poco la dieta y cocinar algo más apetecible…

Como ves, no es necesario que sea un día de regalos materiales… Los regalos más bonitos se realizan de corazón a corazón, ¡y son los que duran toda la vida!