Educación, Salud

Cómo ser feliz: ¡te contamos cómo puedes conseguir una vida más feliz y saludable!

La felicidad: conseguirla es más simple de lo imaginado y no solo una cuenta bancaria

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Cómo ser feliz
Nuria Capdevila

Nuria CapdevilaMaestra y pedagoga

Ser feliz es un objetivo que todos compartimos. A lo largo de la historia, filósofos, científicos y psicólogos han intentado descifrar el secreto de la felicidad y han llegado a la conclusión de que la felicidad es un estado de bienestar emocional y psicológico que se puede alcanzar mediante acciones y hábitos específicos.

La felicidad se encuentra en las pequeñas acciones diarias

Los expertos en Psicología Positiva han dedicado años al estudio de diversos grupos de población con el objetivo de obtener, a partir de datos contrastados, una entendimiento de lo que se considera ser feliz y qué factores generan la felicidad. De este modo, han llegado a la conclusión de que, para aumentar esta sensación, existen ciertos hábitos que pueden, e incluso deberían, practicarse a diario.

Practica la gratitud

La gratitud se define como la capacidad de una persona para apreciar las cosas buenas presentes en su vida, sin importar cuán pequeñas puedan ser. La práctica de la gratitud se ha relacionado con una mayor satisfacción vital, una mejor salud mental y física, y un incremento en la felicidad en general.

Una forma en la que podemos practicar la gratitud es llevando un diario de agradecimiento. Al final de cada día, escribe tres aspectos por los que te sientes agradecido. Puede ser cualquier cosa, desde un momento especial con un ser querido hasta el hecho de tener un techo sobre tu cabeza. Centrarse en las cosas positivas te ayudará a ver la vida de manera más positiva y a sentirte más feliz.

Rodéate de personas positivas

Las personas que nos rodean pueden tener un gran impacto en nuestro bienestar emocional y mental. Si pasamos tiempo con personas positivas, optimistas y motivadoras, es más probable que nos sintamos más felices y motivados. Por el contrario, si nos rodeamos de personas negativas, críticas y tóxicas, es más probable que nos invadan sentimientos de desmotivación y depresión.

Por ello, es muy necesario rodearse de personas que nos inspiren y que nos hagan sentir bien; personas con las que podamos compartir nuestros intereses y valores. Además, debemos intentar ser personas positivas y optimistas hacia nosotros mismos, ya que esto también atraerá a personas positivas a nuestra vida.

Haz ejercicio regularmente

El ejercicio no solo aporta beneficios al cuerpo, sino que también favorece la salud mental. La actividad física libera endorfinas, que son neurotransmisores que nos hacen sentir bien y reducen el estrés y la ansiedad.

Además, el ejercicio nos ayuda a mantener un peso saludable, a mejorar la salud cardiovascular y a reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Podemos elegir cualquier tipo de ejercicio que nos guste, desde caminar hasta hacer yoga, pero debemos hacerlo de forma regular para obtener los máximos beneficios.

Aprende a manejar el estrés

El estrés es una parte inevitable de la vida, pero si no se maneja adecuadamente, puede tener un impacto negativo en nuestro bienestar emocional y físico. Aprender a manejar el estrés es esencial para conseguir una vida feliz y saludable.

Una forma de manejar el estrés es practicar técnicas de relajación, como la meditación, la respiración profunda y el yoga. También es importante saber delegar tareas, priorizar y hacer tiempo para actividades que nos gusten.

Establece metas realistas

Las metas son valiosas para mantenernos motivados y enfocados, pero es necesario establecer metas realistas y alcanzables. Si nuestras metas son demasiado ambiciosas o poco realistas, es más probable que nos sintamos frustrados y desmotivados cuando no las alcancemos.

Para establecer metas realistas debemos dividirlas en objetivos más pequeños y alcanzables. Por ejemplo, si tu meta es correr una maratón, establece objetivos más pequeños como correr 5 kilómetros en un tiempo determinado, y ve aumentando gradualmente la distancia y la velocidad.

También debemos celebrar los logros a lo largo del camino, ya que esto nos motivará a seguir adelante y nos sentiremos mucho más felices y satisfechos.

Ser feliz

Dedica tiempo a tus relaciones

Las relaciones saludables y significativas son esenciales para la felicidad y el bienestar emocional. Por ello, es fundamental dedicar tiempo y energía a las relaciones personales, ya sea con la pareja, amigos o familiares.

También es importante establecer límites saludables en nuestras relaciones y aprender a comunicarnos de manera efectiva. A veces, esto puede significar tener conversaciones difíciles, pero abordar los problemas en una relación puede mejorar su calidad y hacernos sentir más felices y completos.

Haz tiempo para las actividades que te gustan

Por último, también conseguiremos sentirnos mucho mejor si dedicamos tiempo a las actividades que más nos gustan y que nos hacen sentir realizados. Puede ser cualquier cosa, desde leer un libro hasta practicar un deporte o tocar un instrumento musical.

Hacer tiempo para estas actividades nos ayuda a reducir los niveles de estrés y ansiedad, a la vez que aumenta la creatividad y la motivación que podemos aplicar a otras áreas de nuestra vida.

Un trabajo que nos llene

El Ikigai (propósito vital) es un concepto muy relacionado con la felicidad, ya que si estamos en un trabajo que nos gusta y nos llena, también nos sentiremos más felices.

Lograr un buen empleo con el que sentirnos satisfechos es algo que se puede conseguir fácilmente si tenemos en cuenta tres puntos: en qué somos buenos, qué nos gusta y qué podemos aportar al mundo.

Cuando hablamos de “ser buenos” nos referimos a todas aquellas habilidades y formación que hemos adquirido y desarrollado a lo largo de los años. Si no tenemos la formación necesaria para conseguir nuestro empleo de los sueños, siempre podemos reciclarnos haciendo cursos orientados al puesto que nos gustaría ocupar.

Por otro lado, también debemos valorar qué nos gusta y qué podemos aportar al mundo. De este modo, podemos conseguir un trabajo que desarrollemos con pasión en lugar de como una obligación.

En conclusión, ser feliz es una elección y se puede lograr mediante acciones y hábitos específicos. Practicar la gratitud y rodearnos de personas positivas son los primeros eslabones, aunque también es importante hacer ejercicio y buscar tiempo para las actividades que mejor nos hacen sentir.

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