Club de lectura para que tus hijos amen los libros

Todos los padres quieren que sus hijos sean buenos lectores porque son sabidos los beneficios que tiene para el desarrollo cognitivo de los niños. Guadalupe Puig es una mamá que estaba preocupada por el hábito lector de su hija Margarita que tenía 8 años, así empezó a pensar y tuvo una idea que le fue muy bien… Si quieres que tus hijos amen los libros, sigue leyendo y continúa su ejemplo…

Guadalupe es arquitecta

Guadalupe es arquitecta y profesora de la universidad, ella sabe la importancia que tiene la lectura y quería que su pequeña de 8 años se enganchara a leer. Por eso, creó un club de lectura para su hija y sus 11 compañeras de la escuela. Tienen nombre, sede y rutina, se juntan cada 15 días para intercambiar libros, recibir invitados e ir a librerías a descubrir más literatura.

Ahora, gracias a ese club de lectura, estas pequeñas se leen nada menos que dos libros por semana… Ella puso su casa como sede y se ocupaba dos sábados al mes de motivar a las pequeñas y desde que comenzaron no han parado.

¿Cómo lo hizo?

Después de conocer esta parte de la historia quizá quieras saber cómo lo hizo para ponerlo tú también en práctica con tus hijos. Sus pasos a seguir fueron:

• Lo planteó con el grupo de amigas con el que tiene afinidad su hija
• Se definió que fuesen dos veces al mes (dos sábados)
• Se escogieron diferentes temáticas para tratar cada quedada (cuentos, fábulas, poesía, etc.)
• Decidieron que hubiera un invitado con relación de lo que están leyendo de vez en cuando
• El contenido tenía que ser dinámico y realizar actividades para las niñas de 8 años
• Dos objetivos claros: ganar con libros y dejar de lado tanta pantalla

Lo que quieren conseguir con esto es que la lectura no les aburra ni les canse, ni que tampoco lo vean como una obligación… el secreto está en que sientan que la lectura es ocio, es parte de su tiempo libre. Proponer temas desde el cariño y respetando el ritmo de lectura de cada una es importante, para que no se sientan frustradas.

Encuentros divertidos y muy literarios

Para poder coordinar los encuentros se hizo un grupo de Whatsapp y Guadalupe cuenta a las niñas, qué harán, cuándo lo harán, el intercambio por sorteo de los libros, etc. Y la quedada es en su casa. Cuando acaba la jornada del día de reunión de lectura, crea un vídeo para compartir con las otras madres y cuenta su impresión para que también estén al tanto de lo que hacen sus hijas en el club.

Si hablan sobre una lectura en concreto en un día, hablan de la autora o el autor, de su vida, del contenido del libro… pero siempre de forma amena y divertida. Después crean una pequeña ficha literaria.

Pero aunque el objetivo es que pasen menos tiempo con las pantallas, no les restringe su uso, ella quiere que sean las niñas las que elijan con qué quieren pasar su rato libre: leyendo o con pantallas. Aunque sabe que la lectura es fundamental para su desarrollo… no toda la adicción a las nuevas tecnologías es culpa de la sociedad en sí, los padres son los encargados de hacer algo para que sus hijos lean más y Guadalupe decidió hacerlo.

La lectura ayuda a trabajar y mejorar la inteligencia intrapersonal (capacidad de establecer vínculos positivos con otros) y mejora el autoconocimiento y la capacidad de pensamiento. El hábito de lectura no debe ser una obligación, debe ser un interés más que les guste disfrutar a los niños y niñas.