10 celebridades que supieron vencer sus trastornos

Deshacerse de una etiqueta es muy complicado, sobre todo cuando esta se coloca en la niñez. De hecho, las etiquetas son uno de los mayores lastres a los que deben enfrentarse los niños con trastornos psicológicos como el TDAH, la dislexia y la dispraxia. Muchos padres y profesores creen que no podrán llegar demasiado lejos en la vida debido a que sus alteraciones afectan su aprendizaje y su desenvolvimiento social.

Sin embargo, estos trastornos no siempre tienen que convertirse en una limitación. De hecho, hay muchísimas celebridades que padecen algunas de estas alteraciones y no solo han logrado llevar una vida normal sino que han desarrollado una carrera exitosa en sus respectivos sectores.

Famosos que han superado sus problemas y han tenido éxito

Will Smith

Will Smith fue diagnosticado con TDAH desde pequeño debido a sus problemas de atención y su constante intranquilidad. De hecho, cuando era niño apenas podía permanecer sentado, le costaba concentrarse en las tareas y obtenía resultados académicos más bajos que sus compañeros de curso. Sin embargo, lejos de convertirse en un impedimento, estos “problemas” se convirtieron en un aliciente para su futura carrera como actor y rapero, que le ha valido algunos premios Óscar y Grammy.

Steven Spielberg

En su infancia este reconocido director de cine no era más que un niño a los que los maestros calificaban de perezoso y diferente. Tardó dos años más que el resto de sus compañeros en aprender a leer. Sin embargo, ese mismo niño se convirtió en el adulto que fue nominado siete veces a los Premios Óscar, ha atesorado una fortuna millonaria y ha sido condecorado con la Orden del Imperio Británico. La dislexia no le impidió a Steven Spielberg lograr sus sueños y conquistar la fama.

Whoopi Goldberg

La notable carrera profesional de Whoopi Goldberg no sólo se ha basado en sus grandes dotes como actriz y en su increíble habilidad para hacernos reír. El éxito de Goldberg también se ha debido a su gran personalidad y su capacidad innovadora y creativa, que tuvo que desarrollar después de ser diagnosticada con dislexia. De hecho, cuando era pequeña los niños en el colegio solían llamarla tonta debido a sus problemas para leer, pero en vez de dejarse amedrentar, esa niña aprendió a lidiar con su trastorno y se convirtió en una de las comediantes estadounidenses más famosas, ganadora de un premio Grammy, un Óscar y un Emmy.

Justin Timberlake

¿Quién podría imaginar que este famoso cantautor y actor fue diagnosticado con TDAH cuando era niño? De pequeño no solo era rechazado por el resto de sus compañeros en el colegio sino que también fue víctima de acoso escolar. Tampoco era uno de los mejores de su clase y tuvo muchas dificultades para salir adelante. Sin embargo, el TDAH no le impidió convertirse en un reconocido cantante de éxito merecedor de nueve Grammy y cuatro Emmy, crear su propio sello discográfico y emprender una gran carrera en el ámbito empresarial.

Jim Carrey

El propio Jim Carrey asegura que su gran éxito profesional no solo está basado en sus dotes como actor y comediante sino que se debe a su personalidad, que califica como creativa, innovadora e inquieta, resultado del TDAH. De niño era un alumno intranquilo que hacía payasadas para molestar a los demás. Sin embargo, esa actitud divertida y su conducta intranquila fueron las que más tarde le permitieron convertirse en el famoso actor ganador de varios Globos de Oro que es hoy.

Daniel Radcliffe

¿Quién no conoce a este magnífico actor que saltó a la fama por su interpretación en la saga de Harry Potter? Sin embargo, lo que muchos desconocen es que ese mismo actor que hemos visto enfrentando al mal y venciendo obstáculos en la gran pantalla, ha tenido que enfrentar en la vida real los problemas que ocasiona la dispraxia. Para Daniel Radcliffe escribir a mano o atarse los cordones de los zapatos puede ser una aventura mucho más complicada que proteger a sus amigos de los terribles maleficios de la magia, pero eso no le impidió convertirse en un actor de éxito.

Keira Knightley

Nadie podría imaginar que la estrella de Piratas del Caribe apenas podía leer sus guiones mientras ensayaba para la película. La actriz y modelo inglesa fue diagnosticada con dislexia desde que tenía seis años. Sin embargo, su gran pasión por la actuación la motivó a superar sus dificultades con la lectura, de hecho, ha confesado que su papel en la película “Piratas del Caribe” fue un incentivo para practicar su lectura y superarse a sí misma. Así lo hizo y después de eso ha recibido varias nominaciones a los Premios de la Academia y Globos de Oro.

Henry Winkler

La dislexia, los problemas en matemáticas y las dificultades para aprender no fueron un obstáculo para que Henry Winkler se convirtiera en un reconocido actor, escritor y director de cine y ganara un Globo de Oro. Para el mecánico Fonzie, de “Los días felices”, no fue una tarea sencilla vencer estas adversidades, pero no se dejó amedrentar por ellas. De hecho, recientemente durante la presentación de su libro sobre la dislexia comentó: “Todos ustedes son poderosos. Cada uno de ustedes. Y a pesar de que la escuela pueda ser difícil, no nos define. Todos ustedes tienen ideas inteligentes y maravillosas, por lo tanto todos ustedes son inteligentes”.

Michael Phelps

Para Michael Phelps la natación se convirtió en una manera de lidiar con el TDAH y lo hizo tan bien que ha llegado a alcanzar el récord de mayor cantidad de medallas olímpicas. Su gran hiperactividad y su constante manía de correr de un sitio a otro fue el motor impulsor que necesitó para ganar 22 medallas, de ellas, 18 de oro. Sin embargo, su infancia no fue fácil. Michael recuerda que una profesora de inglés le dijo cuando era niño que no llegaría demasiado lejos en la vida y el resto de sus maestros tampoco tenían mucha fe en él. Por fortuna, todos se equivocaban.

Cher

Esta actriz y cantante ganadora de varios Oscar y Grammys nunca fue diagnosticada de niña con problemas de aprendizaje o dislexia pero lo cierto es que no aprendía al mismo ritmo de sus compañeros de clase. De hecho, según confesó en su biografía: “No podía leer lo suficientemente rápido para terminar toda la tarea y matemáticas era como tratar de entender Sánscrito. La única manera de aprender fue escuchando a los maestros en la clase”. Sin embargo, no fue hasta que llevó a su hijo para que evaluaran sus problemas de aprendizaje y atención que descubrió su propio diagnóstico. Afortunadamente, sus problemas de aprendizaje no representaron un problema para transitar su camino a la fama.