Enseña a tu hijo adolescente cómo afeitarse por primera vez

El afeitado del rostro es mucho más que una simple rutina de cuidado personal para los adolescentes, se trata de un hito en su camino hacia la adultez. Para ellos, el afeitado representa una especie de ritual con el que reafirman su identidad y se inician en las prácticas masculinas. Quizá por ello, también les genera cierta ansiedad y miedo ya que se trata de una nueva etapa completamente desconocida. Por eso, es importante que los padres hablen con sus hijos adolescentes sobre este momento, los preparen y les acompañen durante todo el proceso.

¿Cuándo debe afeitarse por primera vez un adolescente?

En realidad, no existe una edad determinada para que un adolescente se afeite por primera vez. Ese momento varía de un joven a otro ya que depende de los cambios que tengan lugar en su cuerpo como parte de la maduración sexual y de la manera en que asuman esos cambios. Por lo general, la aparición de vello facial ocurre alrededor de los 15 años, pero puede crecer antes o tardar más en aparecer. Algunos adolescentes se sienten orgullosos de su incipiente bigote y eligen esperar para comenzar a afeitarse mientras que a otros les genera mucha vergüenza y prefieren eliminarlo cuanto antes.

Los dermatólogos recomiendan esperar a que el vello facial gane fuerza y sea algo más que una simple sombra. Sin embargo, esto dependerá también de cuán cómodos se sientan los adolescentes con su nueva apariencia ya que, a veces por presión grupal o sencillamente por una cuestión de gusto personal, prefieren no llevar vello facial. En cualquier caso, agradecerán contar con el consejo y orientación de sus padres para elegir el mejor momento, por lo que este hito es una gran oportunidad para fortalecer vuestra relación de complicidad.

La preparación es clave: Acompaña a tu hijo en esta etapa

Tan importante como el afeitado, es el proceso de preparación para ese momento. Elegir la maquinilla más adecuada, una crema de afeitar respetuosa para la piel y un aftershave suave que ayude a reparar la piel tras el afeitado es indispensable para que tu hijo tenga una experiencia positiva la primera vez. Sin embargo, encontrar los productos más adecuados no es una tarea sencilla, por eso es fundamental que acompañes a tu hijo durante este proceso y le ayudes a elegir las mejores opciones.

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En esta etapa, tu hijo también necesitará apoyo emocional porque es probable que tenga muchas inseguridades. Asegúrate de estar disponible para que pueda hablar contigo sobre sus miedos cada vez que lo necesite y pueda comentarte sus principales dudas y preocupaciones. Estar abierto a hablar sobre los retos que impone crecer y madurar no solo te hará partícipe de esta experiencia, sino que te brindará la oportunidad de ayudar a tu hijo a desarrollar una valoración positiva sobre su cuerpo.

Enseña a tu hijo a afeitarse por primera vez en tres sencillos pasos

Una vez que tu hijo esté preparado para afeitarse por primera vez, conviértete en su guía y muéstrale cómo hacerlo paso a paso. Lo ideal es hacerlo tras salir de la ducha ya que el calor abre los poros y esto permite eliminar el vello con mayor facilidad. Y, si es por la noche, mucho mejor ya que tu hijo evitará exponerse al sol, el viento o el frío y la piel podrá calmarse y regenerarse mientras duerme. Una vez listo, explícale cómo se hace.

1. Preparar la piel

El primer paso y quizá uno de los más importantes durante el afeitado consiste en preparar el rostro para el proceso. Para ello, se debe utilizar un gel o espuma de afeitar que suavice la piel y facilite el afeitado. Lo ideal es que se trate de un producto delicado, respetuoso con la piel y que no contenga alcohol ya que podría irritar la epidermis. El producto se debe aplicar sobre los dedos de la mano y extender en la zona de afeitado ya que debe cubrir toda el área por donde se pasará la maquinilla.

2. Pasar la maquinilla

Con la piel lista, ha llegado el momento de pasar la maquinilla. Se recomienda utilizar una maquinilla de varias hojas para evitar cortes innecesarios y conseguir un afeitado más preciso y, preferentemente, con el cabezal flexible para que se adapte bien al rostro. Es importante tener en cuenta que la maquinilla debe pasarse en la misma dirección del crecimiento del vello ya que esto evitará la aparición de irritaciones y rojeces. Asimismo, deben utilizarse las dos manos, una para estirar la piel y la otra para pasar la maquinilla cuidando de no presionar demasiado. Es mejor pasar la maquinilla varias veces que una sola vez demasiado fuerte.

3. Reparar la piel

Tras el afeitado es normal que la piel esté sensible y un poco irritada, sobre todo teniendo en cuenta que se trata del primer afeitado de tu hijo adolescente. Aplicar agua fría puede ayudar a cerrar los poros y calmar el rostro. Sin embargo, para ayudar a reparar la piel en profundidad se recomienda utilizar un aftershave. Se trata de una especie de loción que se aplica tras el afeitado para cerrar los poros, calmar la irritación e hidratar la piel. Eso sí, mejor que no contenga alcohol ya que podría resultar contraproducente e irritar la piel.

Parte de las instrucciones también consiste en enseñarle algunas normas básicas de higiene y limpieza a tu hijo adolescente. Explícale cómo limpiar el baño y los accesorios tras el afeitado. Lo ideal es enjuagar la maquinilla con agua caliente para eliminar los restos de vello y crema de afeitar que hayan quedado y dejar que se seque de forma natural ya que utilizar una toalla o papel para secarlas podría estropearlas.

Luego, se deben retirar los restos de vellos que hayan caído al lavabo para evitar que se vayan por el tragante. Y por último, se recomienda enjuagar el lavabo con agua para dejar todo impoluto. ¡Y listo! Tu hijo adolescente ya tendrá las claves principales para afeitarse la próxima vez solo, aunque aún tendrá que entrenar varias veces antes de encontrar la técnica de afeitado que mejor le funciona.